Se les acabó la paciencia. Residentes de la comunidad de San Vicente y de otros sectores aledaños, en el distrito de Barú, trancaron desde la 5:30 de la mañana de ayer, la carretera que conduce hacia el corregimiento de Limones.
Moisés Marín, presidente de la Junta Local de esta comunidad, manifestó que más de 3 mil personas se ven afectadas porque el suministro de agua potable es deficiente.
Señaló que a pesar de plantear el problema a las autoridades desde hace más de un año están a la espera de una respuesta.
Reiteró que más de 300 personas se mantendrán en la carretera, en vigilia permanente hasta tanto las autoridades del IDAANl den una respuesta concreta.