El lunes 8 de septiembre de 1980 Crítica registra el primer galardón de Chiriquí en los torneos juveniles.
Elisinio González G.
| DIAaDIA
Ya son siete los títulos que reposan en los corazones de los chiricanos.
Títulos que, cada uno por separado, tiene un valor especial y una historia diferente.
Títulos inolvidables, pero ninguno comparable a aquel baño de gloria que inundó a la provincia de Chiriquí aquella primera vez.
La historia escrita con tinta dorada registra que el primer Torneo Nacional de Béisbol Juvenil lo abrazaron los hijos del Valle de la Luna en el año 1980, bajo las órdenes de Pedro "Pepe" Osorio.
Fue un campeonato con grandes hazañas y grandes nombres que aún se mantienen brillando en los libros sagrados de la pelota panameña.
NACE LA HISTORIA
La XI versión del Campeonato Nacional de Béisbol Juvenil se inauguró oficialmente el viernes 22 de agosto de 1980 en el Estadio "Matuna" de La Chorrera.
Cabe mencionar que la ronda regular sería a una vuelta y la final a dos, que disputarían los cuatro equipos que más victorias lograran en la primera etapa del torneo.
Se pudo comprobar que el campeonato se jugó en los estadios "Matuna" de La Chorrera, Roberto Mariano Bula de Colón y el Juan Demóstenes Arosemena de la ciudad capital.
HAZAñA MAGICA
La historia revela que los chiricanos tuvieron un inicio de campeonato de terror.
Chiriquí cayó 12 carreras por 1 ante Herrera en el Estadio Juan Demóstenes Arosemena, en el estreno de ambas novenas.
La victoria fue para José Ríos, mientras que el derrotado fue Carlos Iván Ruiz.
Al día siguiente, Chiriquí volvió a saborear lo amargo de la derrota, cuando fue superado 8-1 por Panamá Oeste en el Estadio "Matuna" de La Chorrera.
Los chiricanos fueron víctimas de José Diéguez y Alfredo González.
Diéguez fue el lanzador ganador luego de cubrir la ruta completa, con cinco imparables, una carrera, cuatro bases por bolas y cinco ponches.
González, por su parte, remolcó tres carreras para ser el líder a la ofensiva.
De seguro que en aquel año, los expertos nunca pensaron que Chiriquí podría levantar cabeza.
Sin embargo, aquel "Ave Fénix" se levantó de las cenizas para esculpir una hazaña mágica.
Fueron seis victorias de forma consecutiva las que hilvanaron los chiricanos, de las cuales cinco fueron por blanqueos. De estos cinco blanqueos cuatro fueron al hilo, cifra récord en los campeonatos juveniles.
Revela la historia que Chiriquí conquistó su primer triunfo al vencer a Los Santos 1-0. Luego superó en fila a Bocas del Toro 10-3; Panamá Metro 2-0; Veraguas 3-0; Coclé 6-0; y Colón 13-0.
MOMENTO CUMBRE
En una hazaña poco común, los equipos de Herrera, Chiriquí, Colón y Panamá Metro clasificaron a la ronda final, todos con récord de seis victorias y dos derrotas.
Como se había establecido antes de que se escuchara el grito de "playball", esta etapa había sido pactada a dos vueltas y el ganador resultaría aquella novena que conquistara el mayor número de victorias.
Fue así como llegó el momento cumbre... el momento que muchos chiricanos guardan hoy en su corazón... aquel domingo 7 de septiembre de 1980 cuando los hijos del Valle de la Luna vencieron a los herreranos 3 carreras por 2 en el Estadio Juan Demóstenes Arosemena, en el último partido de la final.
Fue un día mágico para Chiriquí, pero triste para Panamá Metro, que dependía de una victoria de Herrera para provocar un empate en el primer lugar.
En la última jornada, Metro venció 10 por 3 a Colón y se quedó con el subcampeonato.
Volviendo al juego entre chiricanos y herreranos, el lanzador ganador fue Carlos Espinoza en función de relevo.
Espinoza relevó en la octava entrada al abridor Roberto Cedeño, quien fue el que permitió las dos carreras de los herreranos. Estas carreras fueron fabricadas en el cuarto y séptimo episodio.
Por su parte, Chiriquí fabricó sus dos primeras carreras en el tercer capítulo, en las piernas de Jorge Ríos y Delcides Espinosa, gracias a un doblete remolcador de Fulvio Batista.
La otra anotación, que al final fue la decisiva, llegó en el quinto capítulo, cuando Delcides Espinosa pegó triple para llevar a la casa a Juan Eloy Cedeño.
PARA ENMARCAR
Pedro Osorio es el único director que ha llevado a dos equipos diferentes de la categoría juvenil (Colón 1979) Herrera (1980) y de forma consecutiva, a conquistar la gloria.