María Magdalena, la pequeña beisbolista

Quizás las muñecas de trapo, las ligas chinas o los juegos de té nunca fueron entretenimiento para la pequeña María Magdalena, quien encontró en el béisbol una diversión que a sus 10 años se ha tornado toda una pasión.

“Nena”, como la llama cariñosamente su madre, empezó a jugar al béisbol a los cuatro años cuando su padre, Héctor Raúl Pimentel, dirigente del béisbol darienita, la llevaba a los cuadros de béisbol a presenciar las prácticas.

Desde aquel entonces, María comenzó a demostrar interés por el deporte. Al instante, despertó la atención de sus padres, quienes deciden apoyarla en lo que más le gusta hoy día, que es jugar al béisbol.

Según su madre, María Pimentel, la pequeña beisbolista hace su debut en la categoría bin bin, pasando por la pre- infantil, en la que jugó por tres años con la selección de Darién.

Esta pequeña ha escalado tanto que participó en el último campeonato nacional infantil 2013 de Pequeñas Ligas.

La orgullosa madre le aseguró a DIAaDIA que al principio le costó aceptar que su hija jugara un deporte dominado por niños, por lo peligroso que podía tornarse, pero después la felicidad que se plasmaba en el rostro de María, en cada partido, hizo que se convirtiera en su fanática número uno.

Figura clave

Dentro del equipo de Darién, María toma el control de la segunda base, pero otra de sus cualidades defensivas es la receptoría, posición que tiene un gran nivel de dificultad.

Pero aquí no acaban las habilidades de “Nena” dentro del campo de batalla. Esta niña tiene nervios de acero porque siempre está decidida a subirse al “potro indomable” para enfrentarse a cualquier equipo.

Le gusta lanzar muchas bolas rápidas, aunque confesó que le fascina lanzar algunas curvas.

María, quien jugaba por primera vez en la categoría infantil con la novena darienita en el pasado campeonato nacional infantil que se realizó en el distrito de La Chorrera, se llevó el mérito de ser la única niña en participar en este certamen.

Futuro dedicado al diamante

Por reglamento, María solo puede jugar hasta la categoría intermedia (15 años).

Según su madre, el sueño de la joven beisbolista es convertirse en entrenadora de béisbol.

“Cuando sea grande, quiero enseñarles a otros niños de mi provincia de Darién, así como lo ha hecho mi padre. Amo el béisbol, y siempre lo voy a practicar con mis amigos”, dijo “Nena”.