El Decreto 7 no debilita el marco normativo ambiental de Panamá.
Didier Hernán Gil
| DIAaDIA
Los grupos ambientalistas de Panamá alcanzaron suspirar con una decisión del Gobierno. Y es que aplauden la determinación del Presidente y del Consejo de Gabinete, que sancionaron la derogación del artículo 11 de la Ley del Parque Nacional Coiba, que permitía la pesca de atún con redes de cerco.
En su lugar entró en vigencia el Decreto N.° 7 del 16 de febrero de 2009, cuyo informe gacetario es el 26224.
De acuerdo con la ambientalista Jessica Young, gerente de Incidencia Política de la Fundación MarViva, es de importancia establecer zonas de exclusión para restringir el aprovechamiento pesquero en el Océano Pacífico panameño, puesto que permite conservar, con una visión a largo plazo, los recursos marinos.
"Esperamos que los diputados de la Asamblea Nacional le den categoría de ley a la zona de exclusión tal y como se había previsto", dijo. De concretarse esta aspiración, Panamá no debilitaría la designación que tiene el Parque Nacional Coiba como Sitio de Patrimonio de la Humanidad y Zona Especial de Protección Marina.