Viernes 18 de febrero de 2005. El balompié nacional está triste, y no es para menos.

Uno de sus hijos queridos acaba de perder una difícil batalla, un difícil partido, quizás el juego más importante de su vida.

La justicia panameña condenó a 20 meses de prisión a José Luis Garcés, luego de casi tres años de estar indagando en un caso por intento de homicidio ocurrido el 30 de marzo del 2002.

La noticia fue recibida por la familia del fútbol panameño como un balde de agua fría, pero sobre todo por "El Pistolero", quien ayer se perdió en un oscuro abismo, tras conocer el fallo de los magistrados.

DIAaDIA intentó conocer la reacción del habilidoso futbolista, pero los esfuerzos de la corresponsal Yodalis Bethancourth resultaron infructuosos, pues la familia se negó a hablar y lo único que se limitaron a decir es que Garcés no se encontraba en su residencia ubicada en Puerto Caimito, pero además, tenía el celular apagado.

CONSTERNADOS

Con mucha congoja acogieron los jugadores de la Selección Nacional de Fútbol la noticia, un día antes de iniciar su lucha en el torneo UNCAF, clasificatorio para la Copa de Oro.

Y es que según lo expresaron varios futbolistas, requerían de él para que disparara bombazos en la Copa de Naciones.

Pero no sólo eso, pues Jaime Penedo, el arquero del elenco, manifestó que el delantero ha cambiado su conducta y esperábamos que se le diera una oportunidad para que pudiera explotar su talento futbolístico.

"La verdad es que José Luis ha cambiado su comportamiento y el fútbol representa una gran oportunidad para que pueda hacer su futuro en el extranjero y así ayudar a su familia, que es muy humilde", destacó.

FEPAFUT SE MANIFIESTA

El secretario de la Federación Panameña de Fútbol, Rubén Álvarez, dijo a DIAaDIA que no descansarán en su lucha por lograr el sobreseimiento del jugador y gestionarán incluso con el Presidente de la República, pero dentro de lo legal, la posibilidad de que se le brinde otra oportunidad, pues "Garcés es punta de lanza del seleccionado y Panamá lo necesita para la hexagonal rumbo al Mundial de Alemania 2006".

El federado le envió al artillero un mensaje de confianza y fe en Dios, exhortándolo a mantener la calma en este difícil momento que atraviesa.