Un nuevo integrante de la familia, el cachorro, no deja de hacer travesuras. ¿Al borde de un ataque de nervios? Con calma, el nuevo mimado acaba de dejar a su mamá y hermanitos. ¡Todo es nuevo para él!
La elección del nombre es importante, si es corto mejor. El cachorro debe aprender a ser llamado por su nombre y responder a éste. Todos van a cooperar en la educación del animal, pero lo aconsejable es que el instructor sea sólo uno. Las órdenes deben ser claras y precisas, nunca contradictorias. Sesiones breves, el animal aprenderá de a poco y lo mejor es que aprenda divirtiéndose. Establecer horarios y rutinas para crear hábitos de comida, necesidades y paseos.
|