
Pascal es instructora de boxeo en el gimnasio de Curundú.
Foto: Erick Barrios
Pascal es instructora de boxeo en el gimnasio de Curundú.
Foto: Erick Barrios
Pascal es instructora de boxeo en el gimnasio de Curundú.
Foto: Erick Barrios
Pascal es instructora de boxeo en el gimnasio de Curundú.
Foto: Erick Barrios
Pascal es instructora de boxeo en el gimnasio de Curundú.
Foto: Erick Barrios
Pascal es instructora de boxeo en el gimnasio de Curundú.
Foto: Erick Barrios
Pascal es instructora de boxeo en el gimnasio de Curundú.
Foto: Erick Barrios
Como un error en la vida. Así pueden muchos catalogar lo ocurrido con la boxeadora panameña Ana Pascal en el 2008. Pero hay quienes tienen mucho que agradecer a esta púgil panameña, quien hasta el sol de hoy sigue en el deporte del tinglado.
“Cuando llegué a la preventiva en el 2008, yo hacía mi rutina de ejercicios y las muchachas se me acercaron para que les enseñara”, con estas palabras Ana Pascal recuerda los pininos del boxeo en el Centro Femenino de Rehabilitación, en San Miguelito.
Fue entonces cuando comenzó la fiebre de este deporte entre las internas. “Muchas las veían (a las practicantes) con recelo, pero con el pasar del tiempo se fueron integrando al régimen de entrenamientos”, recuerda Pascal.
La hoy entrenadora de boxeo dijo que no fue hasta el 2009 cuando “ya la estructura estaba formada”, y las chicas se interesaron más.
Las estancia de Ana en el centro fue corta, pero la semilla ya estaba sembrada: “cuando salí dejé encargada a una tica a la que le decíamos ‘Wilda’; yo le di todos los ‘tips’ y ella siguió con el programa”, destacó.
Hasta el momento, se ha mantenido el programa de boxeo dentro del Centro Femenino de Rehabilitación y Pascal ya tiene permiso para seguir entrenando a las chicas para, según ella, “llevarlas algún día a pelear afuera de forma profesional”.
“Hablé con la directora del centro y ella me dio el aval para venir dos días a la semana y seguir entrenando a las boxeadoras”, confirmó la atleta, que, por el momento, da clases de boxeo y trabaja con Pandeportes.
Era evidente el respeto que le demostraban las internas y el cuerpo de custodios del centro hace algunos días a Pascal, cuando se realizó la cartilla de boxeo llamada “K.O. a la Violencia”.