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Mucha seguridad por exclusiva
Está muy hinchada. (Fotos: Alexander Omar Santamaría / EPASA)

Franklyn Robinson | DIAaDIA

El nacimiento del hijo de Sandra fue más custodiado que la visita del Príncipe Carlos a Panamá. Quiero contarles que poder ver a Sandra Sanoval fue toda una maratón. Al llegar al hospital Punta Pacífica, habían dos seguridad y nos dijeron que teníamos que esperar a que dieran la orden para poder ir a la habitación de la estrella. Pasaron tres horas y nos dejaron subir.

Pero antes de eso, nos dijeron que no se podía subir las cámaras. ¿Ah? Sí amigos, no somos ni de TVN, ya que la exclusividad es de Telemetro y sólo el "Diario de Sandra" podía filmar, porque ni Código 4 pudo. ¿Cuánto le habrán pagado a Sandra?

La cosa fue que después, dieron el "go" para que los camarógrafos subieran. ¡Cool!

Cuando subimos nos topamos con un seguridad en la puerta del cuarto de Sandra Sandoval que era dirigido por "Mano negra" o "La fula" una seguridad privada muy "maluca". ¡Horror con ella!

TIENE TRES HABITACIONES

En el piso 8 del Hospital Punta Pacífica, Sandra tenía bajo su dominio tres habitaciones. ¡Jooo... al estilo de Angelina Jolie! ¡Aja! Una era para recibir a los invitados, en la otro estaban los regalos y los familiares, y en el otro estaba Sandra y también tenía un recibidor. ¡Cuánto lujo!

DOS MINUTOS Y SEIS SEGUNDOS CON SANDRA

Aunque no lo crean "Mano negra" o "La fula" que era la que cuidaba a Sandra, nos dio sólo dos minutos con la cantante y por robarnos seis segundos, por poco nos saca por la ventana del hospital. Antes de entrar a la habitación nos hicieron lavar las manos con alcohol y en ese momento nos emocionamos, porque pensábamos que ibamos a ver al "zambito", pero que va, era la misma "ñata" esperándonos. ¡Nooo...!

Sandra nos dijo que desde meses atrás sabía que su bebé sería niño y que "Las pica, pica" fueron las que se encargaron de hacer los chocolates, con el nombre del bebé.

Rapidito nos contó que paga por día en el hospital de 300 a 200 dólares diarios, porque lo otro lo paga el seguro que adquirió.

Sandra contó que la cesárea se la hicieron tan perfecta, que no le quedará cicatrices. ¿Ustedes que piensan?

¿Y las libritas? Aseguró que las bajará en sus show, porque desde que sube a la tarima toda esa grasa va para abajo.

Su regreso a la tarima podría ser dentro de tres meses, ya que la "ñata" dijo que cuando se sienta bien regresará.

Y lo más cómico es que Sandra confesó que aguantó su parto como una "macha". Por ahí nos contaron una anécdota. Dice que cuando nació el pequeño Luis Esteban, quien pesó seis libras y midió 49 centímetros los doctores no podían agarrarlo, porque estaba tirando paso como si Sandra estuviera bailando en una tarima. ¡Jajaja!





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