Por ahora, las familias viven en ranchos que no son seguros.
Elena Valdez
| Coclé, DIAaDIA
Tres familias de indígenas se encuentran casi a la intemperie en El Jagüito de El Roble de Aguadulce. Un incendio consumió la vivienda en donde vivían.
El siniestro, que aún se desconoce qué lo provocó, dejó sin nada a los indígenas, quienes ahora mantienen un conflicto por las tierras en donde se encuentran ubicados. Unos a otros se culpan del incendio.
Ricardo Santos perdió todo en el fuego, por lo que parte de su familia están alojados en el antiguo hospital Marcos Robles de Aguadulce, pasando trabajo, porque no tienen dinero para nada.
"Con mucho esfuerzo teníamos ahorrado 300 balboas para comprar los útiles escolares a nuestros hijos y todo eso se perdió, ahora dormimos debajo de un ranchito de cogollos de caña y no tenemos nada", dijo el indígena.
Mientras tanto, estas familias esperan una ayuda para reconstruir sus casas.