Hola Moza: Le escribo porque realmente estoy muy triste, ya que mi novio me dejó. Él siempre fue muy cariñoso conmigo, pero yo soy muy celosa.

Cuando yo me ponía celosa él me abrazaba, me mimaba y me decía que no me pusiera así, que me amaba, que yo era su vida.

Reconozco que siempre me reclamaba porque yo no socializaba ni con sus amistades ni con su familia, siempre les ponía cara, ya me lo había advertido, que su familia es muy importante para él al igual que sus amigos, que no les pusiera cara, que eso a él no le gustaba.

Me dijo en una ocasión que si seguía así me iba a dejar y que después no me quejara, pero yo no le creía, porque estaba segura de su amor.

Pero pasó lo inesperado. Me dejó, él soltó su par de lágrimas y me dijo que ya no podía más, que yo no me dejaba querer, que mi resequedad lo había lastimado y que no quería seguir así.

Aunque los primeros días pensé que regresaría, me di cuenta de que no. Lo he buscado y me comentó que no quería ilusionarme, que ya no hay vuelta atrás, pero yo no me resigno.

Cuqui

Estimada Cuqui: Lo mejor que puedes hacer es darle tiempo al tiempo.

Debes darle su aire para que te busque. No le insistas, él está muy dolido y por ahora lo que menos quiere es que lo atosigues.

De todo lo que ha pasado debes aprender una lección, y es no ser posesiva y celosa. Eso no te va a llevar para ningún lado, debes hacerte el firme compromiso de corregir este defecto que tanto daño te hace.

Recuerda que la familia es para todo el mundo una parte fundamental de la vida y no puedes pretender que porque sea tu pareja, los aparte, eso no lo lograrás ni con él ni con ningún hombre.

Ojalá él te perdone, porque se nota que lo quieres mucho y que estás sufriendo, espero que de todo esto hayas aprendido la lección.