Chiriquí, bajo la tutela de Alberto Macré, vuelve a llegar a la cima del béisbol nacional y a sumar otro título para esta provincia beisbolera.
La historia se volvió a repetir. Una vez más la provincia más laureada en la última década en los torneos juveniles acaba de encontrarse con las mieles del triunfo, para poner a celebrar a toda la provincia de Chiriquí, que respira y vive el béisbol a lo grande.
Gran parte de este éxito no podría ser posible sin Alberto Macré, un personaje que ha estado presente en los cinco últimos títulos de los hijos del "Valle de la Luna".
Macré ha encontrado la fórmula perfecta para llegar a lo más alto en los Campeonatos Nacionales de Béisbol Juvenil.
"Nuestro secreto es trabajar fuerte, eso fue muy importante, nosotros venimos entrenando hace varios meses atrás y con la preparación", dijo Macré, técnico que ha ganado los últimos cinco títulos de la provincia de Chiriquí. "Aquí hay personas que estuvieron con el equipo cuando acompañé a (Aristides) Bustamante en el Premundial de Puerto Rico como: 'Cuto' Mendoza, Rodolfo 'Candelilla' Aparicio y Gustavo Espinoza, que se fajaron con este equipo para llegar donde estamos".
Dura prueba
A pesar de lucir bien en todo el campeonato, los altibajos de los jugadores en esta categoría son algo normal, pero Macré sabe cómo solucionar esto con facilidad para sacar el potencial de sus jugadores.
"Esta categoría es muy difícil, uno tiene que tener mucha paciencia para estos muchachos. Los padres tienen un papel fundamental en este grupo, nos ayudaron mucho para que estos jóvenes fueran a todos los entrenamientos", agregó Macré. "Mira, esta serie final estuvo muy competitiva. Herrera no fue un rival fácil, hay que felicitarlos porque siempre lucharon por lograr la victoria".
MAS QUE UN TECNICO
Un punto importante en el éxito del equipo de Chiriquí fue el respeto, admiración y confianza de su entrenador, que siempre le da su respaldo.
Sin dudar cada jugador, entrevistado por este medio, llenó de elogios a Macré, quien logró en la noche del lunes el noveno campeonato de la altiva provincia chiricana.
"Beto ha sido mi mejor entrenador, él hace que nosotros estemos animados y siempre nos respalda, me siento muy orgullo de que él sea mi director", dijo Rodrigo Vigil, capitán del equipo, quien entró en la historia al ser el primer jugador que llega a 100 imparables en tres temporadas. "Pero todo esto de lograr otro campeonato es gracias a Dios, no ha sido fácil".
Otro jugador que no dudó en brindar sus palabras fue el inicialista Mauricio Barría, quien se mostró agradecido por su comprensión y consejos.
"Es un excelente entrenador, te da confianza y siempre te apoya, eso hace que uno juegue sin presión y dé lo mejor en el terreno", añadió este joven pelotero.
Franklin Moreno no se quedó atrás, al considerarlo un gran maestro que sabe cómo conducir a un equipo a ganar.
"Es una gran persona que le gusta trabajar fuerte y también es exigente, pero esa son cosas que te llevan al éxito de un torneo", agregó el receptor del conjunto campeón.