Dios puso su mano. Cerca de 40 niños de la comunidad de Pan de Azúcar, distrito de San Miguelito, vivieron una experiencia única en la que los valores y el amor a Dios se hicieron presentes en una hermosa tarde. Afortunadamente, el ensordecedor sonido de las balas estuvo ausente.

Un grupo de personas organizaron un matiné en el que los presentes pudieron disfrutar de una película basada en valores cívicos y morales, además de pasar un rato ameno aprendiendo más sobre las enseñanzas de Dios, sin tener que pagar nada.

El siervo Edwin Joseph manifestó que, al igual que esta actividad, se espera organizar otras en las que se logre rescatar niños que son presas fáciles de la violencia.

"Hay que hacer de Pan de Azúcar un lugar diferente, en donde la armonía impere", expresó Cristina Gómez, moradora del sector, quien admitió que todavía falta trabajar más, pero para esto requieren de más ayuda y unión por parte de la comunidad. Si desea cooperar, puede llamar al siervo Joseph al 6014-5428.