
Así quedó el camión que aplastó a los trabajadores. Sus pertenencias quedaron alrededor.Fotos: EVERGTON LEMON
Así quedó el camión que aplastó a los trabajadores. Sus pertenencias quedaron alrededor.Fotos: EVERGTON LEMON
Así quedó el camión que aplastó a los trabajadores. Sus pertenencias quedaron alrededor.Fotos: EVERGTON LEMON
Los compañeros llegaron la lugar.
Los materiales que transportaban.
Es la segunda vez que en esta curva ocurre una tragedia.
Así quedó el camión que aplastó a los trabajadores. Sus pertenencias quedaron alrededor.Fotos: EVERGTON LEMON
Los compañeros llegaron la lugar.
Los materiales que transportaban.
Es la segunda vez que en esta curva ocurre una tragedia.
Así quedó el camión que aplastó a los trabajadores. Sus pertenencias quedaron alrededor.Fotos: EVERGTON LEMON
Los compañeros llegaron la lugar.
Los materiales que transportaban.
Es la segunda vez que en esta curva ocurre una tragedia.
Así quedó el camión que aplastó a los trabajadores. Sus pertenencias quedaron alrededor.Fotos: EVERGTON LEMON
Los compañeros llegaron la lugar.
Los materiales que transportaban.
Es la segunda vez que en esta curva ocurre una tragedia.
Así quedó el camión que aplastó a los trabajadores. Sus pertenencias quedaron alrededor.Fotos: EVERGTON LEMON
Los compañeros llegaron la lugar.
Los materiales que transportaban.
Es la segunda vez que en esta curva ocurre una tragedia.
La ruta de trabajo indicaba que irían hacia Cerro Azul, pero cuando ya venían de regreso en una bajada en curva por el sector conocido como La Hacienda el carro se volcó aplastando a los tres hombres.
Las varillas de hierro, las carriolas y el zinc quedaron sobre ellos y parte de la vía, dificultando el tráfico.
Todo ocurrió ayer a eso de las 10:30 a.m. en la vía principal de Cerro Azul, donde había personal del Ministerio de Obras Públicas realizando trabajos de reparación.
Gerardo Quintero, banderero, manifestó que una vez ocurrió el accidente fue donde los afectados y les decía: ”Compañero, compañero responda”, pero ninguno decía nada.
Al lugar llegaron los bomberos que, a través de una pala mecánica y otros artefactos, sacaron los tres cuerpos que quedaron atrapados en los hierros retorcidos del vehículo. Una vez afuera, recibieron ayuda por parte de paramédicos quienes dictaminaron la muerte de los tres.
Los cadáveres de Quintero, Porras y Castro fueron colocados a un lado del camión y tapados con una lona azul. Al lugar llegaron otros compañeros de trabajo, quienes, cabizbajos, miraban los cuerpos.
Uno de los jefes manifestó que Porras era un subteniente jubilado, servicial y buena persona. Quintero y Castro eran nuevos laborando.