Todo un monstruo. El Estadio Rommel Fernández Gutiérrez está casi en un 100%, solo hacen faltan algunos detalles para que la obra sea entregada.
La noche del miércoles se realizaron las pruebas de luces y de la pantalla gigante que tendrá este coliseo que servirá de albergue para el fútbol panameño.
Solo falta terminar la pista de atletismo que debe estar lista el próximo 21 marzo para que la obra sea entregada por completo.
Por seguridad, la cantidad de butacas que debía albergar este majestuoso coliseo, que al principio se dijo eran 35 mil, se redujo al 30 mil, por recomendación del Cuerpo de Bombero, que solicitó que se ampliaran las escaleras para que los aficionados puedan salir con mayor rapidez si se presenta algún contratiempo.
En horas de la noche de ayer se realizó un partido amistoso entre las selecciones sub-21 y sub-17 masculinas, para probar cómo se ha adaptado la grama natural al estadio. Solo queda esperar que culminen estos últimos arreglos y todos los panameños podrán apreciar al nuevo Rommel.