Los antidepresivos de nueva generación no funcionan, salvo en los casos más graves y en la mayoría de los pacientes sólo tienen un efecto de placebo.
Esa es la conclusión de un estudio llevado a cabo por científicos del Reino Unido, Estados Unidos y Canadá que examinaron todos los datos existentes sobre ese tipo de sustancias, incluidos los de pruebas clínicas que los laboratorios no publicaron en su día.