Unidades del Cuerpo de Bomberos y de la Policía Nacional de Santiago, acudieron a un centro comercial que se dedica a la venta de pinturas en la Calle Novena, porque fueron alertados del derrame de un químico que hasta la tarde de ayer se desconocía su procedencia.
El capitán Nelson Solís, de la Oficina de Seguridad de los Bomberos, señaló que se harán las investigaciones para saber qué fue lo que ocurrió con la sustancia derramada, la que pudo ocasionar un incendio o explosión.
Aunque no sucedió nada, hubo corredera por los olores que emanaban del depósito de pintura, donde también salía cierto humo que se pensó que se trataba de un fuego.
En el mismo edificio funciona una universidad privada.