Las campanas de algunas iglesias de Panamá comenzaron a sonar hoy tras la llegada de Benedicto XVI a Castel Gandolfo, el palacio pontificio donde se alojará a partir de este jueves, cuando dejará de ser papa.
Las campanas de la iglesia Don Bosco y del Santuario Nacional, en la capital panameña, sonaron brevemente este jueves, pese a que portavoces de la Iglesia habían informado la víspera que no habría actividades especiales este día.
El arzobispo panameño, José Domingo Ulloa, pidió el miércoles a los católicos "vivir en paz y en oración" la histórica renuncia de Benedicto XVI al papado y resaltó la valentía del pontífice al "reconocer sus limitaciones".
El papa llegó a Castel Gandolfo y se asomó al balcón central del palacio para saludar a las miles de personas reunidas en la plaza, en el último acto público de su pontificado, que concluye a las ocho de la noche local.