Amy Winehouse no ha dejado de usar drogas, según informa el diario británico The Sun.
De acuerdo con amigos de la artista, citados por el diario, ella nunca dejó el vicio, pues lo hizo cuando estaba internada en una clínica de rehabilitación al norte de Londres.
“Amy está inestable, como nunca antes lo estuvo. En un momento, ella aparenta estar bien, pero al siguiente minuto está tirada en el suelo llorando y diciendo que no logrará vivir. Creo que el tiempo que pasó en la clínica la convirtió en un ser depresivo y sin emociones”, contó un amigo.