No hubo goleada, pero...

El conjunto paraguayo se paró firme en la cancha desde el comienzo del juego, pero la expulsión de Víctor Cáceres, cuando apenas se corrían 17 minutos de la primera parte, le dio la oportunidad a la Roja de nivelar las acciones. Pese a esto los locales nunca perdieron la calma y su inferioridad de hombres dentro del campo casi no se notó.

Sobre el final de la primera parte, un pase filtrado de Armando Cooper pudo recalar en la meta de Justo Villar, pero Edwin Aguilar mandó la pelota por encima del pórtico de los de casa.

Ya instalados en el tiempo complementario, el técnico nacional, Julio Dely, dio ingreso a Yairo Yao, Luis “Matagatos” Renteria, José Pinzón y a Juan De Gracia; en lugar de Luis Ovalle, Aguilar, Cecilio Waterman y Aníbal Godoy, respectivamente.

Con los cambio el conjunto panameño tuvo más velocidad y desborde por las bandas, pero la contundencia no se vistió de rojo, por el contrario, sobre los minutos finales (min. 88) Jonathan Santana aprovechó una gran jugada de Edgar Benítez e inclinó la balanza a favor de los locales.

Hay que destacar la gran actuación de Armando Cooper, quien pese a jugar con una cortadura en su cara desde el minuto 17 fue el eje del juego panameño, con su gran agilidad y destreza con el balón.