
Elizabeth Valdés considera que los niños son esenciales para mejorar la sociedad.
Fotos: QUINT? MORENO
Elizabeth Valdés considera que los niños son esenciales para mejorar la sociedad.
Fotos: QUINT? MORENO
Elizabeth Valdés considera que los niños son esenciales para mejorar la sociedad.
Fotos: QUINT? MORENO
Es buena pintando las caritas de los niños.
Los menores de edad la adoran.
No pueden faltar sus herramientas.
Sus compañeras de trabajo la admiran.
Elizabeth Valdés considera que los niños son esenciales para mejorar la sociedad.
Fotos: QUINTÍN MORENO
Es buena pintando las caritas de los niños.
Los menores de edad la adoran.
No pueden faltar sus herramientas.
Sus compañeras de trabajo la admiran.
Elizabeth Valdés considera que los niños son esenciales para mejorar la sociedad.
Fotos: QUINTÍN MORENO
Es buena pintando las caritas de los niños.
Los menores de edad la adoran.
No pueden faltar sus herramientas.
Sus compañeras de trabajo la admiran.
Elizabeth Valdés considera que los niños son esenciales para mejorar la sociedad.
Fotos: QUINTÍN MORENO
Es buena pintando las caritas de los niños.
Los menores de edad la adoran.
No pueden faltar sus herramientas.
Sus compañeras de trabajo la admiran.
Elizabeth Valdés considera que los niños son esenciales para mejorar la sociedad.
Fotos: QUINTÍN MORENO
Es buena pintando las caritas de los niños.
Los menores de edad la adoran.
No pueden faltar sus herramientas.
Sus compañeras de trabajo la admiran.
Esta dama trabaja en la Alcaldía de Panamá desde el año 2006, se desempeña como técnica en enfermería en los parvularios y brinda atención de salud a los menores de edad que allí acuden diariamente.
Actualmente a Valdés la podemos encontrar en el centro parvulario de Calidonia y en Pedregal, donde lucha para que cada día sus niños crezcan sanos y fuertes, y sobre todo con fuertes valores morales que los ayuden a ser buenos ciudadanos panameños.
En el barrio de San Cristóbal en Alcalde Díaz, sus vecinos la admiran y respetan por su don de buena gente. Sus hijos se sienten felices y satisfechos por la labor que realiza con los niños de diversos sectores de la capital.
Con orgullo, Elizabeth destaca que nació en Chiriquí el 8 de septiembre de 1963, está casada, tiene cuatro hijos y dos nietos que adora bastante.
Poco a poco esta dama ha aprendido junto a sus compañeras a pintar rostros en las distintas ferias familiares, giras médicas y actividades que se realizan en el Municipio de Panamá.
Para ella es muy importante ver a los niños felices, ya que los pequeños se sienten bien cuando se les toma en cuenta.
En el año 2004 y 2005 desempeñó su profesión como técnica en enfermería en el Hospital Nacional y en el Hospital San Fernando.
Elizabeth aconseja a todas las personas a las que Dios les ha brindado un talento, que no teman y desarrollen sus habilidades, porque es algo muy bonito cuando la gente, sobre todo los niños, se marchan felices.