
El trabajo en el café internet. Para muchas personas, en especial los jóvenes, los cafés cibernéticos son unos de los sitios que buscan para hacer sus trabajos de oficina; sin embargo, una encuesta realizada por Regus en 26,000 empresas en 90 países, indicó que la privacidad de los documentos, la seguridad de las pertenencias y el ruido de los otros clientes de los cafés son los tres mayores inconvenientes que sufren los empresarios que van a estos lugares a trabajar.
Estos hallazgos difieren de los resultados de una investigación anterior de Regus, en los que se señalaba que un 64% de los empresarios preferían centros de negocios profesionales para proveer un ambiente de trabajo productivo y adecuado para los negocios.
Pero la encuesta reflejó que el nuevo lugar preferido de los gurúes de los negocios son los cafés como espacio de trabajo. Esto se debe a lo tentador del espacio que ofrecen los cafés: servicio WiFi gratuito, un ambiente lleno de actividad, además, deliciosos capuchinos y “frappé” disponibles de forma permanente.
Pero tendría que preguntarse: ¿convierte esto a un café en el lugar de trabajo ideal?
La empresa Regus, que se ocupa de soluciones innovadoras de espacio de trabajo, consultó a empresarios en todo el mundo para encontrar la respuesta. Y el resultado de la encuesta es un "no”.
Los encuestados enfatizaron que los cafés no pueden ser la norma, puesto que no garantizan ni promueven la productividad, seguridad ni profesionalismo.
En la lista de desventajas de trabajar en un café figuran los clientes ruidosos que dificultan las llamadas telefónicas y, por supuesto, la falta de impresoras, escáner y equipos comunes de oficina, lo que entorpece el trabajo. Los cafés también figuran en la lista de lugares prohibidos para realizar reuniones con clientes. A los ejecutivos más adultos les resultará más difícil concentrarse en este tipo de ambiente que a los ejecutivos más jóvenes. Sin importar la generación a la que se pertenezca, los fisgones son un problema.
Michael Turner, vicepresidente de Regus en Latinoamérica, señaló que: “Gurúes de negocios han señalado que trabajar desde un café se ha vuelto cada vez más popular y, además, que todos saben que la salida ocasional a buscar un capuchino acompañado de servicio WiFi es una oportunidad que no se puede dejar de lado. Sin embargo, las últimas encuestas indican que si bien esto funciona sin problemas en visitas breves, en el largo plazo pueden afectar gravemente la productividad”.