‘Panameñísimo’

Un hombre que no se rinde. Rafael Antonio Núñez Sosa lleva luchando en Panamá 20 años desde que llegó al país procedente de República Dominicana. Recordó que un domingo pisó suelo canalero con el apoyo de un amigo y ya el lunes estaba trabajando.

Actualmente, tiene un puesto de venta de legumbres, con el cual ha logrado graduar de la universidad a tres hijos, y el cuarto actualmente está estudiando en la secundaria. Este padre orgulloso manifestó que este negocio es su fuente de inspiración para levantarse diariamente a las tres de la mañana e ir al Mercado de Abastos a comprar sus legumbres y frutas, para luego trasladarse a La Peatonal, donde tiene su puesto de venta, y realizar su faena diaria.

Este hombre manifiesta que para tener algo en esta vida siempre hay que sacrificarse, y es lo que hace diariamente para sacar a su familia adelante y poder dejarle algo de herencia el día en que él falte en esta tierra.

“Me siento más que panameño”, manifestó Núñez, “pues a pesar de que no nací en el Istmo, he hecho todo lo posible y estoy trabajando y viviendo legalmente en este país, al cual le debo mucho”.

Explicó que no todos los días son buenas las ventas, pero trata de mantener una buena atención para el cliente, lo que considera la clave de su éxito.

Para él, Panamá es un lugar de mucho trabajo, solo hay que buscarlo y saberlo conservar, y está en desacuerdo con aquellos que dicen que no hay trabajo.

Este vendedor ha logrado tener clientes que le van a comprar en horas de la noche, ya que para no dejar los productos solos, tiene a una persona que le cuida y vende en el puesto a esas horas.