En busca de la redención. Eran las siete de la mañana, y en la iglesia de Don Bosco casi no había espacio para entrar. Hombres, mujeres y niños llegaban de todos los sectores de la ciudad, con el fin de recibir la imposición de las cenizas.

Esta ceremonia se realiza el Miércoles de Ceniza y marca el inicio de la Cuaresma, celebración religiosa más importante para los católicos, que culmina 40 días después con la representación de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.

En todos los rincones del templo, había personas arrodilladas, dando gracias a Dios por las bendiciones que reciben cada día.

El padre Oscar Rodríguez Blanco, párroco rector de la Basílica de Don Bosco, dijo: "hoy Miércoles de Ceniza, iniciamos nuestro peregrinar hacia la paz y se hace con un gesto simbólico, como es la imposición de las cenizas. Esto nos recuerda nuestra caducidad, que no somos eternos y que debemos rendir cuentas a Dios de nuestras acciones".

Además, insta a los creyentes para que tomen en serio el Miércoles de Ceniza, a fin de que éste sea motivo de fe, regocijo y enseñanza a las futuras generaciones.

Este tiempo marca el inicio de una nueva forma de vida, que Dios por medio de su hijo regaló al hombre para la redención de sus pecados.

"La reflexión y la verdadera conversión de la familia católica, es lo que le da el verdadero sentido de santidad a la Cuaresma", dijo el párroco.