“Quiero tocar el cielo”


Víctor Bárcenas - DIAaDIA

“Cada paso es una meta y quiero tocar el cielo”, con esta consigna Karla Riley despierta todos los días, sabiendo que al “acariciar” una pelota de fútbol y siguiendo los latidos de su corazón podrá labrar un mejor porvenir para ella y su familia.

Esta delantera, de tan solo 14 años, es una de las piezas fundamentales de la Selección de Fútbol Femenina Sub-20 de Panamá, que chocará esta noche (7:30 p.m.) ante Cuba, en su arranque en el Torneo Premundial Femenino de la categoría, en donde están en juego tres boletos al Mundial Femenino de Japón 2012.

Para Karla jugar al fútbol es una pasión que lleva con ella desde los cinco años, cuando dio sus primeros pasos en la Escuela de Fútbol Las Promesas, del distrito de San Miguelito.

“El fútbol es una parte muy grande en mi vida; vivo, como y respiro fútbol, es el deporte que me ha llevado a ser quien soy y espero practicarlo siempre”, dijo Riley, residente del barrio de Villa Guadalupe.

Uno de los mayores ídolos de Karla es el delantero panameño del Dallas FC, Blas Pérez, ya que ambos son producto da la “multi” conocida como La Raza Pura.

“Blas (Pérez) siempre me da consejos, me dice que tengo que mantener una buena forma física y me orienta. Sueño con ser como él, jugar en el extranjero y ser reconocida internacionalmente, portando la bandera de Panamá”, contó la dueña de la casaca número 20 de la Rojita.

A su corta edad esta chica ya es un ejemplo a seguir en su barrio, y es que con solo 14 años está a punto de vestir la camiseta nacional en dos categorías (Sub-17 y está a punto de colgarse la camiseta nacional en la Sub-20), cosas como estas la convierten en un ejemplo para la juventud.

“Soy una jugadora de fútbol a la que todos conocen. Hay niños que me dicen que soy su ídolo; los señores(as) me felicitan por haber llegado a la selección nacional, es algo que me emociona”, reconoció.

Por lo pronto, Karla desea, junto a sus compañeras de selección, apoderarse de uno de los cupos para participar en el Mundial de la categoría, seguir creciendo y convertirse en una gran jugadora de fútbol, ya que espera ser parte de esa revolución femenina que vive el fútbol nacional.

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