
La creatividad y esmero distingue a Luz María Lino, de 40 años.
Fotos: QUINT? MORENO
La creatividad y esmero distingue a Luz María Lino, de 40 años.
Fotos: QUINT? MORENO
La creatividad y esmero distingue a Luz María Lino, de 40 años.
Fotos: QUINT? MORENO
Bufandas que se confeccionan.
Las usa para vestirse.
No titubea para explicar el proceso.
Nuevo producto que se comercializará.
La creatividad y esmero distingue a Luz María Lino, de 40 años.
Fotos: QUINTÍN MORENO
Bufandas que se confeccionan.
Las usa para vestirse.
No titubea para explicar el proceso.
Nuevo producto que se comercializará.
La creatividad y esmero distingue a Luz María Lino, de 40 años.
Fotos: QUINTÍN MORENO
Bufandas que se confeccionan.
Las usa para vestirse.
No titubea para explicar el proceso.
Nuevo producto que se comercializará.
La creatividad y esmero distingue a Luz María Lino, de 40 años.
Fotos: QUINTÍN MORENO
Bufandas que se confeccionan.
Las usa para vestirse.
No titubea para explicar el proceso.
Nuevo producto que se comercializará.
La creatividad y esmero distingue a Luz María Lino, de 40 años.
Fotos: QUINTÍN MORENO
Bufandas que se confeccionan.
Las usa para vestirse.
No titubea para explicar el proceso.
Nuevo producto que se comercializará.
Esta dama es líder de las seis comunidades que comprenden Río Chico. Ella es respetada por todos por su don de buena gente y al entablar una conversación lo hace con una gran seguridad.
Las mujeres indígenas de la comarca tienen enormes ambiciones, por lo que esperan con unas bufandas que han empezado a confeccionar llevar sus productos al exterior, pero esto es dirigido por Luz.
Primero se compra la tela, se inician con nudos, luego se hacen trenzas, para seguir con una serie de pasos que completan las diferentes bufandas, las medidas son importantes en esto que se hace a mano.
Los tipos de bufandas son: Pitalarga, trenza, Semirett y Sinfin, cuyos precios oscilan en 15 dólares.
Lino manifestó que desde los 15 años ha incursionado en las artesanías, pues comenzó con la confección de canastas, ella tiene tres hijos y en la actualidad con orgullo lleva 40 años de vida.
Solo basta con llegar donde Luz, para que ella sin titubear explique lo hermoso que es elaborar artesanías, sobre todo si son indígenas, aunque la dama destaca que es un trabajo arduo, es maravilloso ver al producto terminado.
Este personaje que solo podemos encontrar al llegar a la provincia de Darién, incentiva a todos los panameños que tienen algún talento ha aprovecharlo para beneficio de ellos y del país, ya que hace falta más interés de parte de cada uno de los artesanos en que Panamá sea una potencia en cuanto artesanías se refiere.
Su familia comprende que el trabajo de las artesanías no es fácil, pues lleva concentración y dedicación, por lo que en ocasiones la ayudan en el trabajo.