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Consternación
Doña Yolanda saca fuerzas para organizar el sepelio de su hijo. (Foto: Diógenes Santamaría / EPASA)

Diógenes Santamaría C. | Coclé, DIAaDIA

En Aguadulce, la tristeza se siente en cualquier esquina por la sorpresiva muerte de Anel Omar Rodríguez Barrera, quien dirigía el Instituto Nacional de Cultura.

Su fallecimiento ha llenado de consternación a los aguadulceños, ya que Rodríguez era un hombre que se preocupaba por el bienestar de su comunidad.

Doña Yolanda Barrera, su madre, está deshecha ante la tragedia, pero saca fuerzas para culminar los preparativos para las honras fúnebres que se llevarán a cabo mañana, en horas de la tarde.

Entre las obras que dejó Rodríguez se pueden mencionar el remozamiento del Museo Estela Sierra, la construcción de la Escuela de Bellas Artes de Aguadulce, la instalación de la Dirección Regional del INAC en las antiguas estructuras del cine Max.

Para el 19 de octubre del 2008, fecha de celebración de fundación del distrito, fue el orador de fondo, entregandósele pergamino como hijo meritorio de la ciudad, al igual en la ciudad de Natá. Además, fue abanderado durante las fiestas del 5 de noviembre, gestionó las mejoras de la iglesia de Santiago Apóstol y la continuación de las excavaciones en el sitio Conte.

SU VIDA

Nace en Aguadulce en 1962
Estudió Derecho en la UP y la ULACIT.
Era presidente de la Fundación para la Cultura y el Desarrollo.
Fue asesor en el MITRADEL
Legislador suplente 1999-2004.
Viceministro de Trabajo.
Embajador en Cuba
Director del INAC desde 2007





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