En plena ciudad capital, hay quienes tienen que vivir en condiciones deplorables, insalubres y de inseguridad, tal es el caso de los residentes de Los Libertadores, en Tumba Muerto, donde los problemas habitacionales parecen nunca acabar.

Estos edificios de 14 pisos cada uno, tienen más de 20 años y durante este tiempo, los cambios han sido para mal.

De los siete inmuebles, sólo a uno le funciona el ascensor, el que hace papel de basurero municipal.

Aparte de esto, entre las 10 y 11 de la noche, llueven las bolsas de basura y cualquier tipo de chatarra, porque los ductos de la basura tampoco funcionan y los inquilinos lanzan la basura desde sus balcones.

Después de las 7 de la noche, entrar a uno de los inmuebles es entrar en la boca del lobo, pues varios de los edificios no tienen iluminación y es cuando los delincuentes entran como dueños y asaltan al que pueden.

Aunque en algunos de los edificios recogen el dinero para el mantenimiento, los resultados no se ven, dicen los residentes.

Y aún hay más, porque desde hace 2 meses se rompió una de las tuberías, lo que ha provocado, en varias ocasiones, el desborde de aguas negras.

Los que viven cerca de la tubería tienen que tolerar los malos olores y las moscas. Mientras que unos tienen que privarse de la ventilación, pues deben mantener las ventanas cerradas para que el nauseabundo olor no ingrese a sus apartamentos.

Una de las moradoras contó a DIAaDIA que los trabajos de reparación de la tubería se iniciaron el lunes pasado, pero desde el miércoles los trabajadores no volvieron más, y dejaron las labores a medio palo.

Esta área, que fue construida para brindar soluciones habitacionales, es hoy una desidia.

DETONACIONES

Continúan las detonaciones frente a Los Libertadores, que provocan rajaduras en las paredes y temores.