El empate de Estados Unidos y Cuba le dio un respiro a la selección Sub-23 de Panamá, por lo que este partido de hoy es para dar el todo en la cancha, y si es posible salir muerto para alcanzar el triunfo.
Pero más que respiro, en mi opinión personal, sé que muchos no la compartirán, creo que ha sido más perjudicial para los nuestros, ya que tendrán por delante a los anfitriones, que quedaron herido en su orgullo al empatar con Cuba, por razones deportivas y extradeportivas.
En tal sentido, los norteamericanos saldrán a reivindicarse ante su público, buscando el triunfo a como dé lugar, porque de lo contrario hasta ellos mismos complicarían su clasificación para los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.
A los nuestros le queda la esperanza de poder salir adelante ante un país anfitrión, ya que como muchos recordaremos ese 6 de diciembre cuando contra todos los pronósticos en contra, y jugando de visitante lograron ganarle a Costa Rica un gol por cero, consiguiendo el boleto para este torneo preolímpico. Ojalá y se repita esa bella historia, que llenó de mucha alegría a todo un pueblo que los siguió de cerca.