El señor Eduardo Castillo vive a la intemperie, ya que su casa se cayó y no tiene quién lo ayude.
Él vive en la comunidad de Puerto Gago de Penonomé. Su casa estaba construida de quincha y tejas, con algunas hojas de zinc viejo, pero con el pasar de los años perdió su fortaleza y se desplomó.
Pide al MIVI una casa pequeña, mientras que a Salud se solicita que se le pueda atender gratuitamente y a la Red de Oportunidades que le den el bono que le dan a los más pobres, porque realmente lo necesita.