Truncan su vida

Ortega bajó unas escaleras que daban a la calle y se puso a esperar un taxi, cuando fue sorprendido por delincuentes, quienes le robaron el celular y para colmo, le propinaron un tiro en el glúteo izquierdo con salida al abdomen.

Los familiares que estaban en la casa, ubicada 15 metros más allá, escucharon las detonaciones, pero no salieron por temor; unos vecinos los llamaron para avisarle que Jonathan estaba herido.

Fueron 15 minutos en los que el joven estuvo pidiendo ayuda, hasta que bajó la madre y lo llevó en un taxi al centro de salud de San Isidro, donde falleció.

Diana Ortega, hermana mayor de la víctima, manifestó que Jonathan tenía 12 días de haberse casado por lo civil y estaba muy emocionado, porque construiría su casa. “Siempre fue un buen muchacho, desde que fue mayor de edad trabajó en el RibaSmith y ahora quería hacer una familia”, dijo Diana.

Jonathan cumpliría 27 años el viernes y fue educado con valores y principios morales.