Produce en la víctima, miedo y pérdida de la confianza. (Foto: Cortesia)
María Díaz
| Psicóloga
Puede incluir burlas, amenazas e intimidación. No es un hecho aislado, sino que es constante y prolongado e influye en el rendimiento del alumno.
UN VIEJO PROBLEMA MUY EXTENDIDO
Hay que diferenciar la agresión (física o psicológica) que puntualmente un alumno puede sufrir o ejercer en un determinado momento de la repetición y agravamiento de dichas agresiones dentro de un proceso al que llamamos acoso, término utilizado como traducción del inglés bullying (derivado de bull: matón), y con el que se denomina un proceso que:
2. No se limita a un acontecimiento aislado, sino que se repite y prolonga durante cierto tiempo.
3. Provocado por un individuo (el matón), apoyado generalmente en un grupo, contra una víctima que se encuentra indefensa, y no puede por sí misma salir de esta situación.
4. Y que se mantiene debido a la ignorancia o pasividad de las personas que rodean a los agresores y a las víctimas sin intervenir de forma directa.
CONSECUENCIAS DEL ACOSO
En la víctima produce miedo y rechazo al contexto en el que se sufre la violencia, pérdida de confianza en uno mismo y en los demás, así como diversas dificultades que pueden derivarse de todo ello (problemas de rendimiento, baja autoestima...).
En el agresor aumentan los problemas que le llevaron a abusar de su fuerza identificándose con un estilo violento de interacción que representa un grave problema para su propio desarrollo.
En las personas que no participan directamente de la violencia pero que conviven con ella sin hacer nada para evitarla puede producir.
En el contexto institucional en el que se produce, la violencia reduce la calidad de la vida de las personas.
PAUTAS PARA ERRADICAR LA VIOLENCIA
La serie de investigaciones que hemos realizado refleja la eficacia que tienen las siguientes condiciones para prevenir toda forma de violencia, incluido el acoso escolar:
1. Adaptar la educación a los actuales cambios sociales, desarrollando la colaboración a múltiples niveles.
2. Mejorar la calidad del vínculo educativo y erradicar situaciones de exclusión.
3. Desarrollar alternativas a la violencia estableciendo contextos a través de los cuales puedan expresarse las tensiones y las discrepancias y promoviendo alternativas en todos los individuos a través de habilidades que permitan afrontar la tensión y resolver los conflictos sin recurrir a la violencia.
4. Enseñar a rechazar toda forma de violencia, favoreciendo desde la educación una representación de la violencia que ayude a tomar conciencia de lo destructiva que es en todas sus manifestaciones.
5. Ayudar a romper la tendencia a la reproducción de la violencia y sus secuelas.
6. Mejorar la eficacia educativa de la disciplina.
7. Prevenir la victimación.
8. Insertar la prevención de la violencia en un contexto más amplio: empatía, respeto mutuo y derechos humanos
9. Prevenir la intolerancia y el sexismo.
10. Romper la conspiración del silencio sobre la violencia escolar.
11. Educar en la práctica los valores democráticos que representan la antítesis de la violencia: diálogo, respeto mutuo, tolerancia, igualdad, búsqueda del bien común.