Un grupo de jóvenes extranjeros, de Estados Unidos, Taiwán y Europa, llegó a la ciudad de Las Tablas, con el fin de ayudar y ser agentes de cambio.
Los jóvenes, que en su totalidad eran 70, prefirieron no viajar a Disney y pagar sus pasajes hacia Panamá, para realizar una obra en la Cárcel Pública de Las Tablas, provincia de Los Santos.
Estos jóvenes cambiaron el techo de zinc, el cielo raso y algunas conexiones eléctricas, en el salón que es utilizado por los policías para educar a los privados de libertad.
Cabe señalar, que esta donación fue de la Iglesia Adventista, quienes donaron 6, 000 dólares para los materiales, ya que la mano de obra fue de los jóvenes y de 8 privados de libertad, que colaboraron para la construcción de la misma.