Los niños pequeños se acostumbran mucho a sus compañeros.
Lineth Rodríguez
| DIAaDIA
Para Emiliani, la transición de un colegio a otro afecta más a los pequeños, aunque no descarta que haya adolescentes igual de sensibles. El niño sufre más, porque se acostumbró a su escuela y a sus compañeros. "En otras palabras se acostumbró a su ambiente escolar. Quitárselo lo afecta. Ahora bien, hay que prepararlo con anticipación. Si no se lo prepara, el niño puede manifestar cambios de conducta hasta de rendimiento".
También podrían darse cambios en su estructura anímica, como: falta de apetito, de sueño, resentimientos, se altera su estado emocional, se siente entre otros.
Si es adolescente demorará, pero puede que acepte el cambio, sobre todo, de la primaria a la secundaria.