Transitar por la autopista Arraiján - La Chorrera y detenerse a mirar el poco verdor que queda da mucho qué pensar.
No se está en contra del desarrollo, sino de la manera en que se hacen las cosas. Actualmente esa área es considerada por muchos espectadores como un "peladero", pues solo se ven maquinarias arrasando con las áreas verdes.
Aunado a esto, está la situación de que se construirán más barriadas, pero tanto en Arraiján, así como en La Chorrera hay problemas de desabastecimiento del vital líquido. Este ha sido un problema de arrastre. La pregunta del millón es cómo se le va a hacer frente a esta situación si se continúan construyendo más barriadas.