Desesperación. Los gritos de dolor de una madre desconsolada, en las afueras de la Morgue Judicial, evidenciaban que el cadáver encontrado en Alcalde Díaz la noche del jueves, era de su hijo, Stanley Joseph Ábrego Soto.

Fueron cuatro días de angustia que vivieron los familiares del joven de 22 años, quien desapareció desde el pasado domingo, mientras que su vehículo fue encontrado el martes en la noche en Parque Lefevre.

Horas más tarde, amigos y familiares brindaban todo su apoyo a la familia Ábrego Soto, en su hogar. Ahí, el ambiente no era diferente, la tristeza se sentía en el ambiente. Su hermana Neidis aún no podía creer lo que le habían hecho a su hermano, con quien mantenía una gran relación.

Para ella, su hermano era un joven sano, tranquilo y no tenía problemas con nadie.

La familia sospecha de una colombiana, con la que él salía. Ella vivía junto con otras muchachas más, también colombianas, que se dedicaban a la prostitución.

Sus compañeros de ingeniería en sistemas de la Universidad Latina están consternados con lo sucedido y lo catalogan como un un joven aplicado, tranquilo y muy reservado en cuanto a su vida privada.

Stanley Ábrego cursaba el IV año de la carrera y practicaba en Tecnasa desde hace un mes, sólo le faltaban unos cuantos meses para graduarse.

Según informes preliminares, todo apunta a un crimen pasional.

PRUEBA

Los resultados de la prueba de luminol que se le realizó al vehículo no evidenció rastros de sangre.