La pantalla que más está arriesgando y/o presentándonos o refrescando sus proyectos es Telemetro. Su franja familiar, después del regaño presidencial, los ha llevado a replantear, no solo su programación, sino los contenidos de sus productos hechos en casa. Independientemente del horario, Paparazzi, Infraganti o Parecen Noticias han modificado algo de sus contenidos para, sin perder su esencia, intentar ser una alternativa de entretenimiento; aunque para mí siguen siendo malísimos.
En C4, por ejemplo, la llegada de Caroline Smith les ha dado un aire diferente en pantalla a ese show. Ella no se ve ni chabacana ni vulgar ni exhibicionista ni payasa ni queriendo imitar a nadie, como se veían las anteriores que no daban tregua a pensar, ni siquiera en su inteligencia y sí mucho en lo que enseñaban. Su set, indiscutiblemente bien hecho, bien iluminado y pensando, hace que a pesar de los 10 años que tiene este espacio, se vea como nuevo. Si hoy se compara el set de C4 con el de 'Al Descubierto', el segundo es nada, porque si hay algo que se le tiene que reconocer a Medcom desde siempre, es que no escatiman a la hora de hacer sus escenografías. Ahora corresponde mejorar su contenido. Sigue siendo malo, nefasto, pobre y que no aporta nada. Siguen los muertos, lo supuestamente insólito, la violencia y los temas que alguien equivocadamente les dijo que eso es lo que queremos ver... la competencia: ¡idem!
Su nuevo producto 'Deal or no Deal', personalmente me tiene con sabor agridulce. Primero, ya sabemos que es un show que ya hemos visto y nos los quieren meter como un gol de esquina. Segundo, su presentador, Nelson Bustamente, personalmente me molesta y sustento el porqué. Este señor es un gran animador venezolano. Es indudable su profesionalismo y conocimiento de cómo manejar las emociones de las personas y ser divertido. En otras palabras, es muy bueno en lo que hace. El era perfecto para el Familión Nestlé, que era un show que se transmitía en todo Centro América y que por estrategia y lógica televisiva, no era recomendable contar con un presentador centroamericano y sí uno "vendible" en todos los países. En ese proyecto sí tenía sentido contar con su sapiencia en programas de entretenimiento familiar.
La diferencia ahora es que este proyecto será local y lo local es panameño, debe tener sabor a panameño, oler a panameño y parecer panameño. Para ser más exactos, lo local es arroz con pollo y sancocho, no una arepa ni un pabellón criollo. Yo no puedo creer que no exista talento panameño para conductor de este show. No puedo creer que entre tanta gente buena dentro de Medcom -y fuera de él- no se le diera la oportunidad a alguien del patio. Estela Villa-Real, Juan Carlos Barreiro, Karen Chalmers, Carlos Mastelari, Jorge Ortega, Alex Medela, Marisela Moreno, son nombres que bien pudieron haber sido los presentadores de ese show, porque tienen manejo, son divertidos, tienen experiencia, son recordados y sí, son panameños. Y no, no me vengan con que la franquicia pedía a alguien de afuera porque yo investigo antes de escribir y sé lo que la franquicia exigió. Tampoco es que soy xenofóbico. Este caso causa en mí el mismo efecto que ver a Betina, de "La Cáscara", burlándose de lo que pasa en Panamá y es incapaz de ir a burlarse de algo del Presidente Chávez en Venezuela, porque allá sí respetaría. Tiene que ver con la incoherencia e incongruencia de decir "producción panameña más cerca de ti" y traer a un no panameño "que vive bien lejos de aquí". ¿Comprende la contradicción? A diferencia de TVN y RCM, Telemetro está apostando a show nuevos y eso es positivo. Solo nos queda ver los resultados. ¡Mosca, estoy con mi lupa!