¿Quiénes son más trabajadores los hombres o las mujeres?, pues según una colega somos las mujeres. Sí, así mismo como leen, ya que después que cumplimos unas ochos horas de trabajo (en los sueños solamente, porque siempre son más de 12 horas), hay que ir a la casa a seguir trabajando, (lavar, planchar, atender al esposo, entre otras cosas).
Según un colega depende del tipo de trabajo, ya que él asegura que hay mujeres frescas a las que no les gusta hacer nada, y hacen el menor esfuerzo para hacer las cosas.
Creo que por naturaleza somos las mujeres, por lo que mencioné a mi compañera al principio de esta columna. Y es verdad, sin pensarlo y sin queja, a pesar de cualquier día pesado de trabajo, cuando llegamos a la casa no importa ponerse a cocinar para que todo el mundo esté bien, eso se llama instinto maternal.
Lo ideal sería que ese trabajo que hacemos en casa se pueda dividir, un día ellos, otro día ellas, o por lo menos compartir (tú haces esto y yo hago lo otro), para que sea justo, porque así mismo como ellos llegan cansados, nosotras también.
Aunque bien o mal, como dice mi mamá, es el trabajo que con más amor y ganas se hace, el de la casa. Felicidades a todas esas mujeres que después de escuchar a sus jefes gritarles durante todo el día, soportar un horrible tran- que e ir al mercado, después llegan a la casa y se ponen a cocinar para todos, haciéndolo con amor.. ¡Me quito el sombrero!