Está bien que la empresa encargada de la reparación de tramos en los accesos al puente Centenario quiera mantener el área iluminada. Lo que está mal es que coloque grandes luminarias de frente a los conductores que transitan hacia el interior. Eso encandila y pone en peligro la vida de muchos, pues la vía casi no se ve. Es peor que cuando el conductor que viene de frente no hace el cambio de luz, decía ayer un lector que llamó a esta redacción. ¡Aún tienen tiempo de solucionar esta situación!

SIN PARADA

Desde hace mucho tiempo, los asegurados de La Chorrera tienen que esperar sus buses en una "parada" que no tiene techo, sólo el piso, y que está ubicada en plena vía Interamericana, frente a la entrada de la policlínica Santiago Barraza. ¿Y las autoridades?