Es un producto de allá 'onde uno, pero lo preparan y lo venden en la capital. Se trata de las deliciosas "changas", es decir, las tortillas de maíz asadas, las cuales son preparadas por María Francisca Quintero, a un costado de la panadería Tía Mamy, en Vista Hermosa.

Esta mujer es oriunda de la provincia de Herrera, específicamente del pueblo de San José, y manifestó a DIAaDIA que se levanta a las 2:30 a. m. para estar a las 4:00 a. m. en punto en su puesto de trabajo.

Aunque parezca un trabajo sencillo, no lo es, pues tiene que moler el maíz para preparar la masa, hacer las "changas" y luego como a las 10:00 p.m. ponerlas a asar. La señora María calculó que esta faena la va terminando a eso de la una de la madrugada.

Con este trabajo sacó adelante a sus seis hijos, por eso se siente muy contenta, porque gracias a su sacrificio ellos son personas estudiadas y profesionales, que se ganan la vida honradamente. Además, asumió la responsabilidad de criar a sus dos nietas.

Con más de 18 años vendiendo "changas", María se ha vuelto una experta en esta delicia de la campiña, razón por la cual sus clientes siempre vuelven satisfechos en busca de más.

A sus 57 años no entiende por qué hay personas atropellando a otras para quitarle lo poquito que tienen. Dijo esto refiriéndose a la inseguridad a la que se exponen los trabajadores humildes.

Después de décadas de trabajo sacrificado, su mayor sueño es terminar de construir su casa y así tener un lugar cómodo y seguro en donde pueda pasar una vejez tranquila.

El único secreto que tiene para que siempre le vaya bien es tener mente positiva cuando sale de su casa a vender, además de la fe que siempre ha puesto en Dios.

Con esta filosofía que siempre ha puesto en práctica, no comparte la idea de las personas que siempre andan quejándose de que no consiguen un empleo y de lo mal que la están pasando.

LAS GANANCIAS

Al día, María Quintero vende 30 "changas" que le dejan una ganancia de B/40.00.