
Residentes de estas tres comunidades recurren a las quebradas para lavar y asearse.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Residentes de estas tres comunidades recurren a las quebradas para lavar y asearse.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Residentes de estas tres comunidades recurren a las quebradas para lavar y asearse.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
“Tenemos más de ocho meses sin agua en estas tres comunidades y nuestros pozos se están quedando secos”.
Celmira Chirú
“Tengo una niña recién nacida y no puedo asearla constantemente como se debe; las autoridades deben preocuparse por nosotros”.
Omaira Salas
“En la escuela no hay agua y mandamos a nuestros hijos para que no pierdan el año: nuestra salud está en juego”.
Aquiles Valdés
En la escuela nunca hay agua.
Los niños aprovechan las quebradas para darse un chapuzón.
Los niños aprovechan las quebradas.
Residentes de estas tres comunidades recurren a las quebradas para lavar y asearse.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
“Tenemos más de ocho meses sin agua en estas tres comunidades y nuestros pozos se están quedando secos”.
Celmira Chirú
“Tengo una niña recién nacida y no puedo asearla constantemente como se debe; las autoridades deben preocuparse por nosotros”.
Omaira Salas
“En la escuela no hay agua y mandamos a nuestros hijos para que no pierdan el año: nuestra salud está en juego”.
Aquiles Valdés
En la escuela nunca hay agua.
Los niños aprovechan las quebradas para darse un chapuzón.
Los niños aprovechan las quebradas.
Residentes de estas tres comunidades recurren a las quebradas para lavar y asearse.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
“Tenemos más de ocho meses sin agua en estas tres comunidades y nuestros pozos se están quedando secos”.
Celmira Chirú
“Tengo una niña recién nacida y no puedo asearla constantemente como se debe; las autoridades deben preocuparse por nosotros”.
Omaira Salas
“En la escuela no hay agua y mandamos a nuestros hijos para que no pierdan el año: nuestra salud está en juego”.
Aquiles Valdés
En la escuela nunca hay agua.
Los niños aprovechan las quebradas para darse un chapuzón.
Los niños aprovechan las quebradas.
Residentes de estas tres comunidades recurren a las quebradas para lavar y asearse.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
“Tenemos más de ocho meses sin agua en estas tres comunidades y nuestros pozos se están quedando secos”.
Celmira Chirú
“Tengo una niña recién nacida y no puedo asearla constantemente como se debe; las autoridades deben preocuparse por nosotros”.
Omaira Salas
“En la escuela no hay agua y mandamos a nuestros hijos para que no pierdan el año: nuestra salud está en juego”.
Aquiles Valdés
En la escuela nunca hay agua.
Los niños aprovechan las quebradas para darse un chapuzón.
Los niños aprovechan las quebradas.
Residentes de estas tres comunidades recurren a las quebradas para lavar y asearse.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
“Tenemos más de ocho meses sin agua en estas tres comunidades y nuestros pozos se están quedando secos”.
Celmira Chirú
“Tengo una niña recién nacida y no puedo asearla constantemente como se debe; las autoridades deben preocuparse por nosotros”.
Omaira Salas
“En la escuela no hay agua y mandamos a nuestros hijos para que no pierdan el año: nuestra salud está en juego”.
Aquiles Valdés
En la escuela nunca hay agua.
Los niños aprovechan las quebradas para darse un chapuzón.
Los niños aprovechan las quebradas.
Con los rostros sucios por no tener agua en sus casas, se pudo observar a los niños de estas tres comunidades que se encuentran apartadas de la urbe capitalina; allí estaba cansada de falsas promesas de políticos Omaira Salas, madre de seis hijos y residente del sector de San Francisco.
Salas manifestó que los niños no tienen agua en la escuela, a la vez que ya algunos infantes han sido hospitalizados por consumir el vital líquido contaminado; ellos tienen más de ocho meses de no ver el recurso salir de sus grifos.
Los residentes denunciaron que no reciben atención médica por falta del recurso hídrico; además, los pozos y quebradas se han secado, por lo que la situación se complica. Todo este suceso ocurre cuando hoy se conmemora el Día Mundial del Agua.
Especialistas hablan
"El agua y la seguridad alimentaria" es el lema escogido este año para celebrar el Día Mundial del Agua que se efectúa desde 1993. El objetivo es poner de relieve y alentar a los Gobiernos, organizaciones, comunidades y personas a participar activamente para responder al desafío del crecimiento de la población y la producción de alimentos.
Roberto Galán, jefe del Departamento de Gestión Integral de Recursos Hídricos de la Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM), manifestó que la principal empresa del país, el Canal de Panamá, depende del agua, por lo que se han hecho proyectos enfocados a la conservación de los recursos hídricos, a la vez que se requiere actualizar la Ley 35 de 22 de septiembre de 1966, que regula el uso de las aguas nacionales.
Entre tanto, Abilio Pitty, gerente metropolitano del Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (IDAAN), destacó que la escasez de agua ha surgido por el crecimiento de la población y que en este período se ha hecho un levantamiento de sectores sin el recurso, para aplicar proyectos.
Raisa Banfield, directora de la fundación Panamá Sostenible, adujo que es triste que alrededor del 30% de la población no tenga agua, cuando somos el segundo país con mayor cantidad del líquido en América Latina. Asegura que hace falta una política de Estado en el tema del agua.