El triatleta panameño Billy Gordón (Foto: Archivo)
Rogelio Adonican
| DIAaDIA
El triatlón es uno de los deportes más exigentes en el abanico de disciplinas que se practican en Panamá.
Para los triatletas competir en una prueba de alto nivel es un reto adquirido y la meta es terminar, a como dé lugar, la competencia.
Esto fue lo que le pasó al destacado triatleta panameño, Billy Gordón, que el pasado domingo 20 de marzo, en el triatlón de Viña del Mar (Chile), terminó la prueba a punta de corazón y garra.
Gordón, en una comunicación con Eladio Quintero, secretario de la Unión de Triatlón de Panamá (UTP), aseguró que se sentía muy fuerte a su llegada a Chile, pero en la competencia las cosas dieron un giro total en la parte de la natación.
"La verdad fue que me encontré con aguas muy frías, como era de esperarse. Sin miedo fui a la guerra, pero luego de los primeros minutos de haber arrancado muy bien, mi cuerpo se fue quedando sin sensaciones, mis piernas dormidas, lo que hizo que esta etapa fuera un total sufrimiento", expresó.
Gordón salió del agua con bastante ímpetu y con ganas de dar la batalla, pero el atleta señaló que se sintió bastante exhausto, para seguir en la pelea.
"Salí del agua a ver si pegaba con los demás y rescataba mi carrera, ya que mi corrida está siendo mi arma, pero no pude enganchar y me encontré conmigo mismo pensando en si debía seguir o retirarme", señaló.
El panameño pensó en retirarse de la carrera en algún momento, pero el coraje de este "guerrero de la carretera" salió a relucir y decidió seguir en la prueba.
"Pensé que no venía de tan lejos para quedarme viendo la carrera desde afuera, así que me tiré a darle aunque un poco mermado, pero no me 'lapearon', y seguí buscando recoger posiciones y al final me sentí bien de haberla terminado", manifestó.
Cabe señalar que la competencia presentaba un nivel bastante exigente, tanto así que los entrenadores de los triatletas de Costa Rica y Guatemala, prefirieron retirar a sus atletas por seguridad.