Los usuarios del transporte público, de la ruta de buses de Burunga, en el distrito de Arraiján, se exponen al sofocante sol y a la lluvia por una caseta que está en pedazos y sin el techado, ubicada a orillas de la entrada de la comunidad, a unos 100 metros de la vía Interamericana.
Roberto Rodríguez, portavoz de los afectados, recordó que hace seis meses la caseta colapsó, debido a un fuerte impacto por un vehículo que perdió el control y se salió de la vía.
Los más afectados son los estudiantes, cuando esperan el autobús para trasladarse a la escuela. Sin embargo, no hay autoridad que responda al clamor de la comunidad.
A unos cuantos días para el cambio de estación seca a lluviosa, no se observa movimiento para una restauración.
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