
Amir Waithe (izq.), de Panamá, batalla por el balón con Néstor Calderón, de Trinidad y Tobago.
Amir Waithe (izq.), de Panamá, batalla por el balón con Néstor Calderón, de Trinidad y Tobago.
Amir Waithe (izq.), de Panamá, batalla por el balón con Néstor Calderón, de Trinidad y Tobago.
Amir Waithe (izq.), de Panamá, batalla por el balón con Néstor Calderón, de Trinidad y Tobago.
Amir Waithe (izq.), de Panamá, batalla por el balón con Néstor Calderón, de Trinidad y Tobago.
Amir Waithe (izq.), de Panamá, batalla por el balón con Néstor Calderón, de Trinidad y Tobago.
Amir Waithe (izq.), de Panamá, batalla por el balón con Néstor Calderón, de Trinidad y Tobago.
Había que ganar, y fallamos. La Roja sub-23 dio un paso más hacia la catástrofe al empatar ayer 1-1 ante Trinidad y Tobago en el Home Depot Center, en Carson, California.
Los dirigidos por Julio Dely Valdés salieron con todo desde el arranque. En los primeros minutos, arrinconaron a los caribeños, pero poco a poco las acciones se fueron nivelando. No disfrutó de mucha claridad Panamá en la primera parte, salvo por dos intervenciones de Aníbal Godoy. La primera, un cañonazo de media distancia, que logró desactivar el meta trinitense Andre Marchan, y la segunda, un zurdazo que olía a claro gol, pero se fue a las gradas. 0-0, así terminó el primer capítulo de esta novela.
La actitud del conjunto istmeño en la segunda mitad fue más agresiva y tanta insistencia dio sus frutos al minuto 68 cuando Cecilio Waterman (que ingresó en el complemento por un decepcionante Víctor Barrera) --de taquito-- desvió un remate de Godoy, para firmar el 1-0. Minutos después, a Waterman le sería anulado un gol legítimo, tras pitar el árbitro una falta inexistente sobre el portero Andre Marchan.
Pero, a pesar de la falla arbitral, no hay excusa. La victoria --se sabía-- era necesaria, tras abrir el grupo con un revés ante Honduras (3-1). Al minuto 90, Panamá cayó en la desconcentración, lo que fue aprovechado por Shahdon Wincheste, quien con algo de suerte, empujó, tras un serie de rebotes, el balón dentro de la portería de “Manotas” Mejía para decretar la igualdad (1-1). Ahora sí, Londres 2012 queda lejos, muy lejos, si consideramos lo que viene... Mañana, a Panamá le tocará jugársela, nada menos que contra México, que goleó a los trinitenses (7-1) y a Honduras (3-0).