
Ayer se reveló que dejó 4.7 millones de dólares. ¡Qué pocotón!
La inglesa tenía un patrimonio al morir valorado en 6.7 millones de dólares, en activos, antes de pagar deudas pendientes e impuestos.
Todo ese dinero pasará a manos de sus familiares, ya que no tenía testamento redactado. Además, el exmarido de Winehouse, Blake Fielder-Civil, no recibirá ni un centavo de la herencia de la cantante, que es administrada por su padre, Mitch Winehouse.