Todo en la vida le llega a quien sabe esperar, y Eduardo Jiménez no es la excepción de la regla. Este juvenil jugador panameño, poco a poco se está haciendo un nombre en el fútbol salvadoreño, donde desde el primer dí­a del Torneo Clausura 2007, se ha convertido en titular indiscutible en la zaga del CD Águila.

"Esta era la oportunidad que esperaba hace tiempo, y acá el profe me está dando la oportunidad, y como ya Nicolás ha tenido excelente acogida aquí­, pienso que me ha ido bien", indicó Eduardo a DIAaDIA, en entrevista telefónica desde la Casa Club del CD Águila.

"Es una bonita experiencia, independientemente de los partidos que hemos perdido como visitantes, mientras que hemos ganado como locales, ya que aquí­ en casa hemos jugado bien. Pienso que ha sido una experiencia bonita, y gracias a Dios me ha ido bien en estos dos meses que he estado por acá", manifestó el jugador.

CONTRATACION

Según Jiménez, el que tuvo que ver directamente con su llegada al fútbol salvadoreño fue el técnico Gary Stempel, quien le consiguió un cupo en la institución. "Bueno, el profesor Gary me habí­a estado comentando cuando vení­a para acá que podí­a encontrarme un "puestito", bueno, él me estuvo llamando y me indagaba ¿qué yo pensaba de venir a jugar acá? Que hablara con mi familia y me pusiera a pensar. El me encontró el espacio y vine, arreglé toda mi parte salarial y se dieron las cosas", manifestó.

No he tenido ningún problema con ningún compañero y con nadie, me siento bien con el equipo y los salvadoreños. Por acá la afición es un poquito exigente, pero es normal, porque aquí­ sí­ hay gente que apoya, pero todo normal, gracias a Dios.

FUERA DE CASA

Como todo joven que sale del paí­s por primera vez, y se encuentra lejos de su familia, sintió algo de nostalgia por la soledad y la lejaní­a. "Es la primera vez que estaba fuera de Panamá. Los primeros veinticinco dí­as sí­ fue algo distinto para mí­, porque no estaba acostumbrado a estar lejos de mi familia por tanto tiempo, pero creo que también ha sido una gran ayuda que hayan panameños acá, porque cuando nos ponemos nostálgicos, nos ayudamos entre todos, salimos y caminamos", indicó.

Igualmente manifestó: "tratamos de hablar siempre con la familia, para no sentirnos mal; ya la adaptación ha sido buena, en el cuadro me siento mejor, un poco más suelto y no como en los primeros dí­as que estaba algo tí­mido para hacer las cosas. Ya me han dado la confianza y me dicen que encare cuando tengo que encarar, que pegue cuando tengo que golpear; los compañeros, gracias a Dios, me han dado esa confianza".

"Casi todos los dí­as tengo contacto con mi familia porque estoy haciendo algo allá, en Panamá, en mi casa. Por ahora, todos los dí­as me he estado comunicando con ellos por teléfono o chateando por internet".

TRATO DE LA AFICION

Gracias a su juego, Eduardo se ha metido en el bolsillo a una de las aficiones más exigente de El Salvador. "Lo que siempre escucho de la afición es que me dan apoyo cuando salgo a la cancha con "Yuyu" y Juan Ramón; nos dan apoyo y también nos piden más, porque como extranjeros debemos hacerlo mejor que los mismos nacionales", indicó.

"Me ha ayudado mucho la estancia con Nicolás Muñoz acá, ya que él sabe los pasos acá del fútbol; me ha dicho cómo son las cosas; me ha dicho sobre los equipos cómo debemos jugar con ellos; me dice todos los detalles, bueno, le doy gracias a Dios por eso, que me es de gran ayuda", dijo Jiménez.

SELECCION

El sueño de todo futbolista es vestir la camiseta de la selección nacional, y ese también es el deseo de Eduardo, quien tranquilamente nos comenta que es consciente que debe esperar su momento.

"Para estar en la selección mayor te puedo hablar que me hace falta más madurez. Por allí­ si me dan la oportunidad, sí­ pueda que vaya, pero creo que me falta mucho por trabajar para estar en una selección mayor. Creo que sin desesperarme espero mi tiempo; y creo que me falta todaví­a un poco más de madurez para llegar a esa instancia y sentirme bien conmigo mismo cuando tenga que llegar allá".

"Si me dan la oportunidad, con amor y dedicación la cojo, pero no me desespero ni me "achicalo" cuando convocan a los compañeros acá, y bueno, esperando nada más. Apenas tengo 20 años, y sí­ estoy esperando el llamado a la selección olí­mpica (Sub-23), que es la que espero, pero eso sí­, trabajando duro, para tratar de hacer las cosas bien para mi familia y mi paí­s", finalizó diciendo en la entrevista Eduardo Jiménez.