Luchó por su vida, pero sus agresores tenían otra intención. Francisco Castañedas Córdoba, de 56 años, falleció la noche del miércoles a los pocos minutos de haber llegado al hospital Santo Tomás, tras recibir un balazo en el muslo izquierdo y otro en el esternón.

Castañedas Córdoba laboraba como seguridad para la empresa Centinela Security.

Estaba de turno en el residencial Paraíso, ubicado entre calle 29, Calidonia, y avenida Cuba, cuando recibió la visita inesperada de tres sujetos.

Los malandros tenían intenciones de despojar de su arma a Francisco.

Se inició un intercambio de disparos, que dejó herido a Castañedas Córdoba, que luego fue llevado por un patrulla al Santo Tomás.

A este nosocomio llegó, posteriormente, Salvador Ortega, de 29 años, herido en su pierna derecha, y quien es señalado por testigos como uno de los partícipes del hecho.