El velocista británico Dwain Chambers, inhabilitado por el Comité Olímpico Británico para participar en los Juegos de Pekín por dopaje, prometió ayer continuar su lucha contra esta prohibición olímpica pese a haber iniciado una nueva carrera en la Liga de rugby.
"Me gustaría competir en Pekín, voy a hacer 30 años el sábado y ésta podría ser mi última oportunidad", señaló el deportista.