Su vida se deteriora cada vez más. A sus 49 años, le ha tocado enfrentar una dura prueba, a causa de un error que ella misma admitió; y que es consciente que quien lo está sufriendo es su hijo.

Encerrada en el Centro Femenino de Rehabilitación, pide que le den trámite rápido a su caso. Elvia Montenegro tiene 7 meses de estar privada de su libertad, después de haber sido detenida por los alrededores del Centro de Convenciones Atlapa con 21 carrizos de droga, que dice, eran de su consumo. "Yo era adicta", indicó Elvia.

Ella vivía en Veracruz. Su mayor preocupación estando dentro del penal, es su hijo de 16 años, que dejó con su hermano y estudia en una escuela nocturna. "Quisiera salir de aquí para ayudarlo, sé que no está bien y me necesita mucho", señaló.

Explicó que su hijo es bien portado y es el único que acude a visitarla al centro.

"Me siento muy mal, porque él está pagando las consecuencias, fui yo la del error, estoy arrepentida de todo eso y sé que la droga no me ha hecho falta en todo este tiempo, sé que me puedo rehabilitar yo misma", manifestó Elvia.

Su salud y su semblante se deterioran con el paso de los días. A estas alturas de su vida, su cuerpo no aguanta la incomodidad de una cárcel.

En sus noches de soledad, piensa mucho en las cosas que debía estar haciendo fuera, pues trabajaba para mantener a su muchacho.

Solicitó a las autoridades judiciales que le aceleren su proceso judicial.

A JUICIO

Hasta donde le han informado a Elvia, su caso está en un juzgado y la audiencia será en agosto próximo.