Emocionados. Ayer, a pesar de que sus huesos son frágiles a causa de su condición (huesos de cristal), los pequeños de la Fundación de Niños de Cristal vivieron una experiencia sin igual, en la que demostraron que nada les impide atreverse a realizar algo diferente. Ellos tuvieron la oportunidad de tocar e incluso cargar a una bella pitón burumesa en las instalaciones del Instituto Nacional de la Cultura (INAC).
La piel fría del exuberante animal cautivó no solo a los niños, sino a los presentes, quienes con un poco de miedo se atrevieron a tomarse fotos.
Dayana Mitchell, presidenta de la Fundación Niños de Cristal, se mostró muy emocionada al ver la felicidad reflejada en los menores.
En tanto, Jhon Erick, encargado de la empresa Panamá Reptiles, dijo que los pequeños angelitos tienen una gran fortaleza que muchos quisieran poseer.
Este 21 y 22 de mayo, en el pasillo del Delfín en Albrook Mall, se estará haciendo una exhibición de los reptiles todo el día.