La escena era dramática. Una criatura sin vida, de unos 8 meses de gestación, que fue lanzada por su madre, era sacada con un madero con ganchos y un tanque de una letrina o servicio de hueco por personal del Ministerio Público, junto a funcionarios de la Subdirección de Información e Investigación Policial y de la Policía Técnica Judicial.

Este hecho macabro ocurrió en el sector de Río Rita Norte, comunidad de Aguas Claras, en Colón.

La joven madre, de 17 años, parió en la casa de su tío Edilmo Castillo, quien aseguró que en varias ocasiones él y su esposa le preguntaban a la sobrina si estaba embarazada, pero ésta lo negaba.

Castillo trajo a vivir a su casa a su sobrina por la mala condición económica por la que pasaba en la provincia de Coclé; sin embargo, lo que desconocía era que ya estaba embarazada.

La joven tenía unos tres meses de vivir en Aguas Claras de Colón y, aprovechando que estaba sola, parió al niño y lo lanzó de una vez a la letrina de la casa, para que nadie se diera cuenta de lo que había hecho.

La trágica noticia cayó muy mal a la familia Castillo, que se dio cuenta de lo ocurrido al percatarse de que en la cama de la mujer había mucha sangre, pero no veían a nadie con ella.

Inmediatamente, la llevaron al Hospital Manuel Amador Guerrero; sin embargo, nunca dijo dónde había dejado al niño.

ERA UN NIñO

Al sacar el cuerpo sin vida del bebé, las autoridades se dieron cuenta de que era un varoncito con su cuerpo completo.